La Empresa Pagés ha hecho todos los esfuerzos posibles para contratar a José Tomás.
No ha habido acuerdo debido a las exigencias económicas del torero.
La Empresa Pagés ha hecho todos los esfuerzos que estaban en su mano para contratar a José Tomás para la temporada 2010 en la Real Maestranza de Sevilla. Después de casi dos meses de negociaciones, el acuerdo ha sido imposible debido a las exigencias económicas del torero.
Esta empresa había aceptado todas las peticiones del torero e incluso estaba dispuesta a asumir cuantiosas pérdidas con tal de contratarle para el Domingo de Resurrección, pero en el último momento José Tomás ha decidido no aceptar la importante oferta económica de los empresarios Eduardo Canorea y Ramón Valencia.
Los contactos entre la empresa y el torero comenzaron a finales de octubre, cuando el apoderado de José Tomás, Salvador Boix, llamó para decir que si el torero iba a Sevilla sería con la corrida de Núñez del Cuvillo. La Empresa, que en ese momento ya estaba viendo toros en el campo, visitó la finca de Cuvillo y vio una corrida, llegando incluso a un acuerdo económico con el ganadero muy por encima de lo habitual.
La Empresa Pagés dejó claro a Núñez del Cuvillo que la corrida se compraba para lidiarla en Sevilla, independientemente de si la toreaba José Tomás o no. Sorprendentemente, los ganaderos respondieron que si la corrida no la toreaba este torero, no vendría a Sevilla.
En los primeros días de noviembre, una vez adquirida la corrida, los empresarios se pusieron en contacto con el apoderado del torero para citarle en la oficina de la Empresa Pagés en Sevilla.
En este encuentro la empresa aceptó todas las condiciones del torero, es decir: torear el Domingo de Resurrección, un torero para abrir el cartel, que la corrida no fuera televisada y que el ganado fuera de Núñez del Cuvillo. Ante la exigencia de Boix de conocer y controlar el posible cartel, la empresa se mantuvo firme en hacerlo según su criterio, sin especificarle al apoderado el nombre de los otros toreros.
Llegado el momento, el apoderado del torero se negó a hablar de los honorarios de José Tomás, asegurando que los comunicaría "en breves días", según sus propias palabras. Pasados doce días, y ante la falta de respuesta, esta empresa se puso en contacto con Boix, que citó a Canorea y Valencia en Barcelona para rematar allí la negociación, a lo que ambos respondieron que la Empresa Pagés sólo negociaba en sus oficinas de Sevilla.
A pesar de todo, y una vez que el apoderado había regresado de México, Eduardo Canorea y Ramón Valencia accedieron a viajar a Barcelona ayer, día 10 de diciembre, con la firme voluntad de cerrar un acuerdo.
En esta nueva reunión, y una vez conocidas las elevadas pretensiones económicas del torero, la Empresa Pagés puso sobre la mesa una importante oferta económica, explicándole al apoderado que, una vez pagados los honorarios de José Tomás, de las dos figuras que completarían el cartel y el precio de la corrida, asumiría cuantiosas pérdidas.
Esta misma mañana, el apoderado del torero ha rechazado la oferta de la Empresa Pagés, quedando rotas las negociaciones.
La Empresa Pagés ha hecho todos los esfuerzos posibles para que José Tomás estuviera en el abono sevillano de 2010, por eso lamenta que el torero finalmente haya declinado la posibilidad de torear en la Real Maestranza de Sevilla.
No ha habido acuerdo debido a las exigencias económicas del torero.
La Empresa Pagés ha hecho todos los esfuerzos que estaban en su mano para contratar a José Tomás para la temporada 2010 en la Real Maestranza de Sevilla. Después de casi dos meses de negociaciones, el acuerdo ha sido imposible debido a las exigencias económicas del torero.
Esta empresa había aceptado todas las peticiones del torero e incluso estaba dispuesta a asumir cuantiosas pérdidas con tal de contratarle para el Domingo de Resurrección, pero en el último momento José Tomás ha decidido no aceptar la importante oferta económica de los empresarios Eduardo Canorea y Ramón Valencia.
Los contactos entre la empresa y el torero comenzaron a finales de octubre, cuando el apoderado de José Tomás, Salvador Boix, llamó para decir que si el torero iba a Sevilla sería con la corrida de Núñez del Cuvillo. La Empresa, que en ese momento ya estaba viendo toros en el campo, visitó la finca de Cuvillo y vio una corrida, llegando incluso a un acuerdo económico con el ganadero muy por encima de lo habitual.
La Empresa Pagés dejó claro a Núñez del Cuvillo que la corrida se compraba para lidiarla en Sevilla, independientemente de si la toreaba José Tomás o no. Sorprendentemente, los ganaderos respondieron que si la corrida no la toreaba este torero, no vendría a Sevilla.
En los primeros días de noviembre, una vez adquirida la corrida, los empresarios se pusieron en contacto con el apoderado del torero para citarle en la oficina de la Empresa Pagés en Sevilla.
En este encuentro la empresa aceptó todas las condiciones del torero, es decir: torear el Domingo de Resurrección, un torero para abrir el cartel, que la corrida no fuera televisada y que el ganado fuera de Núñez del Cuvillo. Ante la exigencia de Boix de conocer y controlar el posible cartel, la empresa se mantuvo firme en hacerlo según su criterio, sin especificarle al apoderado el nombre de los otros toreros.
Llegado el momento, el apoderado del torero se negó a hablar de los honorarios de José Tomás, asegurando que los comunicaría "en breves días", según sus propias palabras. Pasados doce días, y ante la falta de respuesta, esta empresa se puso en contacto con Boix, que citó a Canorea y Valencia en Barcelona para rematar allí la negociación, a lo que ambos respondieron que la Empresa Pagés sólo negociaba en sus oficinas de Sevilla.
A pesar de todo, y una vez que el apoderado había regresado de México, Eduardo Canorea y Ramón Valencia accedieron a viajar a Barcelona ayer, día 10 de diciembre, con la firme voluntad de cerrar un acuerdo.
En esta nueva reunión, y una vez conocidas las elevadas pretensiones económicas del torero, la Empresa Pagés puso sobre la mesa una importante oferta económica, explicándole al apoderado que, una vez pagados los honorarios de José Tomás, de las dos figuras que completarían el cartel y el precio de la corrida, asumiría cuantiosas pérdidas.
Esta misma mañana, el apoderado del torero ha rechazado la oferta de la Empresa Pagés, quedando rotas las negociaciones.
La Empresa Pagés ha hecho todos los esfuerzos posibles para que José Tomás estuviera en el abono sevillano de 2010, por eso lamenta que el torero finalmente haya declinado la posibilidad de torear en la Real Maestranza de Sevilla.
Foto: El diestro, en una imagen de archivo, momentos antes de recibir el trofeo Manolete 2009. (Ladis).