A Álvaro Domecq



Qué porte! ¡Qué señorío!
¡Qué fuerte mano en la brida!
¡Qué corveta a la salida!
¡Qué aplauso en el graderío!
La espuela acelera el brío
de un bridón de pelo bayo…
El embroque, de soslayo.
Álvaro centra la Plaza.
Con el aire de su raza,
toda España está a caballo.


                               Adriano del Valle

Publicada en nuestro blog de poesía taurina: www.poesiataurina.blogspot.com.es