Por Vicente Zabala de la Serna
Juan Serrano está en su pleno derecho de volver si es que alguna vez se ha ido y si la situación de la economía le aprieta como a todo el mundo. Si además cuenta con padrinos que echen un cable, mejor que mejor, ¿o no? Las redes sociales andan revueltas con su inclusión en Castellón, Valencia, Sevilla... Y no sólo. "No hay renovación en el escalafón ni novedades que ofrecer", se suelen quejar los empresarios que ahora anuncian a Finito de Córdoba en tres ferias lanzadera por su madugadora situación. Meterse en los barrizales de los despachos sólo conduce a que compres todas las papeletas para ganarte enemigos. A nada más, porque luego todo sigue igual. Ni creo ni comulgo con las demagogias de tiesos o modestos al poder. Pero sí en una justicia que reconforta por el mismo precio e idéntico tirón en taquilla. Y sobre todo en una necesidad de quitarle añadas y sumarle mañana a las ferias por el recto camino. De repente me acuerdo de Antonio Nazaré en Pamplona o en Sevilla. Y, sin atraverme a predecir su futuro, algo más que decir que Finito tiene por delante. O rememoro a Arturo Saldívar, que el 12 de octubre en Madrid anduvo en torero macho con la samuelada. Y, no, no odio a uno ni apodero a los otros, pedazo de anormal tuitero. Sí, tú, tú que te escondes tras un seudónimo para calumniar, que sois unos cuantos, una puta banda.
Ni tampoco le tengo manía persecutoria a Matías Tejela -inamovible de La Magdalena y Fallas pase lo que pase-, ni Saldívar me ha enviado tequila, ni Fandiño me ha regalado una parcela en Orduña. Pero lo de Iván F. clama a al cielo de Valencia. Y ya está hecho. Y probablemente la culpa no sea (toda), como no lo es de Finito, de Miguel Ángel Perera, que no quiso a su lado a un señor que en 2012 ha cortado 25 orejas en 23 tardes en plazas de primera categoría. La culpa final es del empresario de Valencia, Simón Casas, que no ejerce su papel de árbitro para evitar que al final Iván Fandiño, que triunfó a ley en las pasadas Fallas con un corridón de Fuente Ymbro, entre casi por la puerta de atrás y de favor en lugar de defender su sitio. Un trato y un sitio firmados desde los seis ... LEER MAS EN NUESTRA PAGINA WEB.
Ni tampoco le tengo manía persecutoria a Matías Tejela -inamovible de La Magdalena y Fallas pase lo que pase-, ni Saldívar me ha enviado tequila, ni Fandiño me ha regalado una parcela en Orduña. Pero lo de Iván F. clama a al cielo de Valencia. Y ya está hecho. Y probablemente la culpa no sea (toda), como no lo es de Finito, de Miguel Ángel Perera, que no quiso a su lado a un señor que en 2012 ha cortado 25 orejas en 23 tardes en plazas de primera categoría. La culpa final es del empresario de Valencia, Simón Casas, que no ejerce su papel de árbitro para evitar que al final Iván Fandiño, que triunfó a ley en las pasadas Fallas con un corridón de Fuente Ymbro, entre casi por la puerta de atrás y de favor en lugar de defender su sitio. Un trato y un sitio firmados desde los seis ... LEER MAS EN NUESTRA PAGINA WEB.