LLevaba ya mucho tiempo sin saber nada de mi amiga María Luisa, una pozoalbense que vende su tierra mejor que nadie, y días antes de que comenzara la feria de Pozoblanco la iba a llamar para que me enviara una foto de su padre, mi amigo Ángel, porque él tiene el honor de haber sido el último periodista que entrevistó a 'Paquirri', momentos antes de que ocurriera la mortal cornada. Y digo tiene, a pesar de que ya no se encuentra físicamente con nosotros, porque su espíritu siempre está con nosotros y lo llevamos en nuestro interior aquellos que lo conocimos.
Y mire usted por donde, en la 2ª del abono de Pozoblanco, cuando José Luis Moreno se plantó en el tercio para guardar el minuto de silencio en recuerdo del maestro 'Paquirri', se me vino a la mente mi amigo que se me había olvidado llamar a su hija María Luisa. Se me olvidó llamarla porque son tantas las cosas que tiene uno en la cabeza y, para colmo, -que ese ha sido el motivo principal-, le he tenido que echar una manecilla, en estos últimos días, a una gran amiga que lo está pasando regular.
Fue entonces cuando decidí dedicarle, -con permiso del maestro-, el minuto de silencio a la memoria de mi amigo, que a la vez, por la diferencia de edad, fue ese abuelo que todos queremos poner en sustitución de aquel que se nos fue sobre todo para que nos enseñe el buen camino en esas situaciones de incertidumbre que no sabemos por donde ir. Y no sólo hizo eso conmigo si no que también disfruté del cariño que mi "abuelo Ángel" le tenía al mundo del toro y más que sus nietos carnales, ya que sus hijos se casaron tarde y Ángel nos dejó, injustamente, antes de lo que todos pensábamos.
Pero estoy seguro que mi amigo 'Angel', por la energía que me transmitió en el apretón de manos que tan sólo nos dimos, por la altura que hay entre el callejón y la primera fila de tendido, cuando vino a verme desde la localidad que ocupaba mi amiga María Luisa y yo, que su padre estaba con nosotros presente en el Coso de los LLanos. Y, lo que es mejor, pasándoselo a lo grande.
Y tanto que a lo grande, porque el festejo, o mejor dicho 'el Festejo de la presente Temporada taurina española', se lo pasó muy bien por muchos motivos: porque de nuevo vio la plaza de su pueblo llena, con un ambiente de gala, con unos 'victorinos' que contribuyeron al éxito de la tarde. Como por ejemplo el buen 2º, el potable 6º en la muleta, el buscón 1º por el derecho pero que se desplazó bien por el izquierdo, el 'chochón' 3º, el 4º bueno por el izquierdo, y 5º que buscó siempre por abajo. Y el motivo principal, que vio como a su paisano, José Luis Moreno, le ha servido su triunfo de la pasada feria de Córdoba para remontar el vuelo de su carrera y saber rentabilizarlo cada tarde que hace el paseíllo.
Y así lo hizo ayer. Un torero que estuvo muy firme toda la tarde, a pesar de las complicaciones que alguno de sus toros le planteó, que no tiró por la calle de las florituras para conseguir llegar fácilmente al respetable, que estuvo desde el principio muy con él y que le exigió cuando le tuvo que exigir, que nunca se le atisbó el cansancio, a pesar de matar a '6 victorinos 6', y que fue capaz, con su arte y torería, que la gente todavía esté toreando por la calle. Lástima que no estuvo fino con los aceros, porque si lo hubiera estado, no hubieran sido '6 orejas 6', sino ....... y algún rabo de peso porque, a pesar del paisanaje, los trofeos de ayer se vendieron muy caros para el rubio torero de Dos Torres. Todo un gran profesional que estuvo muy concentrado y pendiente de todo desde que se lió el capote de paseo. Tanto es así que mucha gente pensó que los capitalistas los iban a sacar por la puerta de cuadrillas cuando lo que estaba buscado el torero era al mayoral de la ganadería para que lo acompañara en su salida triunfal a hombros por la 'Puerta del Gallo'. Como así lo hicieron.
!! Qué gran tarde de toros ¡¡.
De verdad, una gran tarde de toros de que esas que forman parte del 'Libro de Oro' de la historia grande del toreo.
¿Verdad Ángel?.